Como no solo de carpas vive el pescador, en esta ocasión hemos preparado nuestras cañas y hemos ido en busca de una pesca alternativa...El lugar, el gigantesco embalse de la Serena, el mas grande de España y el segundo de Europa por detrás de Alqueva, en Portugal.
La finalidad no era otra que intentar la pesca de un curioso pez; el pez gato de canal o punteado (ictalurus punctatus). Una especie procedente de América y de “dudosa” aparición en nuestras aguas, pero que lleva más de 17 años en aguas españolas, en donde su población mas numerosa y de mayor tamaño es sin duda en el embalse de la Serena.
Ya habíamos tenido un par de contactos anteriores con este pez, dedicando algunas jornadas exclusivas de “catfishing” y habíamos logrado hacernos con algunos ejemplares de muy buen porte, que rondaban incluso hasta los 7 kilos.
En esta ocasión las condiciones no eran las mismas que las anteriores veces, ya que nunca habíamos estado pescando este pez con las aguas tan frías (Diciembre), y aunque los peces dieron la cara con casi una veintena de ejemplares, ninguno superó los 3,5 kg de peso...
Como no podía ser de otra forma, ya que últimamente nos está dando mucho por esto, y teniendo en cuenta que el agua estaba muy fría, las condiciones de luz no eran las idóneas y el agua estaba un poco turbia, decidimos enfundarnos en nuestro neopreno y tomar unas imágenes de este singular pez bajo el agua.
Estamos convencidos de que tiene que haber muy pocas, por no decir ninguna, imágenes subacuáticas de los gatos de canal en las aguas españolas.
Realmente lo fascinante tiene que ser el poder observarlos en libertad y en su medio natural, pero para eso habrá que cargar las botellas y esperar a la próxima primavera...seguro que lo haremos!!
Es posible que mas de uno nos tache de locos o de perder el tiempo por intentar la pesca de un pez que es odiado por mucha gente, pero lo que está claro es que el propio pez no tiene la culpa de estar donde está....
A nosotros nos gusta la pesca de cualquier pez sea de la especie que sea, pero no debemos de olvidar que aparte de todos los contras que puede haber en la aparición de nuevas especies invasoras que compitan con las que ya pescamos normalmente, también hay cierto aliciente en un pez que puede alcanzar los 26 kilos de peso y por el que muchos “yankies” pierden la cabeza....por algo será...
Esperemos que algún día un gato gigantesco acabe rendido en nuestros brazos, hasta entonces, seguiremos intentándolo...
Y feliz año nuevo para todos!!!!
